DuckDuckGo Private Browser es el navegador oficial de la empresa de software DuckDuckGo, que lleva luchando por ofrecer una experiencia de navegación más privada y segura desde el año 2008. Por aquel entonces tan solo ofrecían su propio buscador de Internet, pero poco a poco han ido lanzando más productos, como extensiones para navegadores de terceros o este navegador para sistemas operativos Android, que garantiza seguridad y anonimato cuando te muevas por Internet.
Sin registro, sin usuarios, sin información privada
Lo primero que llama la atención de DuckDuckGo Private Browser es que, a diferencia de otros navegadores, no te pedirá que te identifiques con ninguna cuenta de usuario, ni con ningún correo electrónico, ni nada parecido. La app no hace tracking de sus usuarios. Toda tu información se quedará en tu propio dispositivo Android, ofreciendo incluso un bloqueo parcial de cookies de terceros. En cualquier caso, ninguna información sobre ti llegará nunca a los servidores de DuckDuckGo.
Navegación segura y privada
Aunque no es necesario hacerlo, una de las primeras medidas que deberías tomar cuando empieces a usar DuckDuckGo Private Browser es seleccionar DuckDuckGo como tu buscador por defecto. De esta forma te asegurarás de que todas las búsquedas que hagas no se rastrearán. A diferencia de Google, que almacena tu información para intentar ofrecerte resultados que, en teoría, pueden interesarte más; DuckDuckGo te mostrará siempre resultados puros, sin adulterar, basados exclusivamente en tus cadenas de búsqueda.
El botón de fuego, tu nuevo aliado
Una de las prestaciones exclusivas de DuckDuckGo Private Browser es su Fire Button, que te permitirá eliminar automáticamente todas las pestañas que tengas abiertas, junto con todo tu historial y cualquiera pieza de información que pueda haber sobre tu última sesión de navegación. Desde el menú de opciones podrás configurar exactamente qué quieres que haga este botón. Incluso podrás elegir una animación personalizada para cuando quemes todas tus pestañas.
Almacena tus contraseñas de forma segura
Otra prestación interesante de DuckDuckGo Private Browser es su gestor de contraseñas. Toda la información que almacenes en el gestor de contraseñas se quedará ahí: de forma local, en tu dispositivo Android. Cuando añadas la información, además, podrás introducir notas. Ninguna otra app o página web podrá acceder a tus datos, por lo que estarán almacenados de manera segura. La única manera en la que alguien podría ver tus contraseñas es consiguiendo acceso de forma física a tu terminal Android.
Sincroniza tus marcadores y otra información
Si ya utilizas DuckDuckGo Private Browser en escritorio, podrás sincronizar todos tus marcadores, contraseñas y otra información almacenada, de una manera muy sencilla. Tan solo tendrás que acceder al menú de Sincronización, dentro de Opciones de Configuración. Desde ahí, te bastará con leer un código QR usando la propia app. En tan solo unos segundos podrás ver cómo tu aplicación se actualiza con toda la información que tienes en el escritorio. De nuevo, este proceso es completamente seguro.
Un navegador seguro, privado y gratuito
Descarga el APK de DuckDuckGo Private Browser y empieza a navegar de forma segura y privada. Ni las cookies ni otros elementos de rastreo te molestarán cuando estés navegando con este navegador, especialmente si usas el buscador de DuckDuckGo. El bloqueador de publicidad integrado, además, se encargará de eliminar automáticamente los anuncios más molestos que suelen aparecer en muchas páginas web.
Requisitos (Última versión)
- Requiere Android 8.0 o superior
Comentarios
es lo mejor, de veras
Abra la aplicación value100
"Como usuario de Internet desde hace mucho tiempo, ¡me encanta DuckDuckGo! La privacidad es lo primero aquí, y eso es simplemente esencial para mí como usuario. Los resultados de la búsqueda son preci...Ver más
¡El mejor período del navegador web!
Se recomienda agregar una versión china y cambiar el primer ícono por uno redondo.
Los iconos de la página "favoritos" son extremadamente grandes y crean una sensación de calambres. El navegador suele ralentizarse. Falta la dirección de soporte.